1-Es una de las formas en las que el parto puede comenzar.

2- El inicio espontáneo con contracciones o la rotura de la bolsa de las aguas son las formas más conocidas, pero la inducción al parto también es otra manera habitual de finalización de la gestación.

3-Inducir o provocar el parto se realiza bajo indicación médica, siguiendo criterios de salud materna o fetal según protocolos avalados por la praxis médica.

4-En esta decisión vosotras sois parte activa, ya que se os informará del porqué de esta elección y se os pedirá vuestro consentimiento informado.

5-Una vez indicada la inducción, se procede a programar el día y la hora de ingreso en el hospital que habéis elegido. Los profesionales de Sala de Partos os estarán esperando.

6- La comadrona que os asistirá y acompañará en vuestro parto será quien os recibirá e informará de cómo y cuándo se iniciará la inducción y cuáles serán los pasos a seguir.

7-La comadrona, que será la profesional de referencia que vivirá todo el proceso de parto con vosotras, os ayudará a despejar dudas, aclarar conceptos y, sobre todo, aliviar inquietudes propias de este momento.

8-La inducción al parto nos pone delante de un escenario de trabajo que necesita de tiempo, paciencia e información regular sobre su evolución, un acompañamiento que siempre tendréis en los profesionales que os asistan.

9- Aunque os hayan programado una inducción, siempre podréis elaborar vuestro “plan de parto" donde expresar vuestros deseos e intenciones para el nacimiento de vuestro hijo. El equipo que os atienda intentará hacerlos posibles y si no fuera así os razonará los motivos.

10-Ojalá que todo evolucione cómo habéis pensado, pero si finalmente no es así, pensad que ha habido una razón, un porqué, y que el equipo que os atiende os propondrá la mejor opción tanto para la salud de la mamá como del bienestar del bebé.

Marifé Estébanez

Matrona